No pocos asesinatos se han producido motivados por los celos, tanto entre personas homosexuales, como del mismo sexo, y unas veces solamente se han saldado con el asesinato de la pareja, sino también por el nuevo acompañante-mujer u hombre- de la nueva pareja conformada, pero hay que añadir que han aparecido casos de celos infundados y otros más se han producido por el simple hecho de querer romper relaciones.
EL CRIMEN DEL BAÚL
El crimen de la calle Hermosilla
Conocido con estos dos nombres, tuvo una gran propaganda mediática, en un caso de rápida solución y de habilidad policíaca de investigación.
¿Cómo fueron los hechos?
El asesinato de una persona varón, en la calle Hermosilla 127, primero, letra E.
¿Cuándo se produjeron?
El día de 2 de noviembre de 1955.
¿Quiénes fueron los personajes?
… El asesino confirmado:
… Jesús Lacosta Calzado, delincuente habitual, de 17 años.
--- Colaboradores:
… Antonio Gómez Muñoz, de 20 años
…Antonio Conejero Vicente, de 19 años
--- La víctima:
…Manuel Santonja Sampere, de 38 años de edad.
¿Cuál era la situación de cada uno de los personajes?
… Jesús Lacosta Calzado, era un delincuente habitual, que hacía chantaje a sus clientes después de tener relaciones sexuales y no declarar su condición de homosexual. Tenía 17 años, apellidado y conocido como “El Ruso” y que vivía en la calle de El Sordo número 40.
… Antonio Gómez Muñoz, amigo del anterior, localizado en la calle Sierra de Bullones, 5.
… Antonio Conejero Vicente, también amigo de Jesús y domiciliado en la calle Alfalfa, 5.
… Manuel Santonja Sampere, soltero, había sido actor en numerosas obras teatrales con importantes personajes de la escena teatral, pero tuvo que dejar su ejercicio cultural por problemas con el estómago y se dedicaba a actuar de pedicuro a domicilio y era homosexual. En su vivienda recibía visitas de todo tipo de personajes.
¿Cómo sucedieron los hechos?
El 8 de noviembre de 1955 el hermano de Manuel Santonja, Francisco, realizó una denuncia en la Comisaría informando de la desaparición de su hermano, comunicando que había ido varios días a verle y no le abría la puerta.
Cuando se introdujo en el piso de su hermano encontró la casa totalmente desarmada, pues faltaban muebles, ropas, cortinas, alfombras, y en las paredes de las alcobas restos de sangre en las paredes rascadas para evitar ser descubiertas, por lo que solamente quedaban en existencia una cama, dos colchones y una almohada.
En principio se pensó en investigar a determinadas personas frecuentes en las visitas a Manuel y, de las consultas recibidas, se pudieron enterar que hacía días que dos personas y un chico joven habían sacado del edificio una caja grande de madera que fue montada en un coche y trasladada sin saber el lugar, que fueron comunicadas por diversas personas que lo vieron y el informe de la portera Rufina Rocío.
En realidad, los motivos del asesinato se produjeron como consecuencia de una última visita donde estuvieron disfrutando. Al amanecer discutieron por la negativa de la víctima por seguir siendo explotado para que no confesara su homosexualidad por el asesino, ya que le había contagiado una enfermedad, lo que produjo la discusión que terminó con el asesinato, procediendo a llevar a la víctima a la ducha para eliminar todos los rastros de sangre.
Realizadas las diligencias oportunas detuvieron a los dos jóvenes que habían portado el baúl-los dos Antonios- y tras los trámites oportunos se detuvo en Barcelona a Jesús Lacosta.
En las declaraciones los dos Antonios afirmaron que el baúl lo habían depositado en el barrio de Peña Grande.
Realizadas las investigaciones, el tío de Jesús, llamado Fabián, declaró que, cuando llegó de su trabajo, había encontrado un baúl depositado en su casa y que al día siguiente su sobrino había desaparecido y el baúl tampoco estaba. No encontraron el baúl con el cadáver de donde vivía el joven, pero que lo habían llevado cerca de “La Veguilla” en Tetuán de la Victorias, donde se consiguió localizar el baúl y en su interior el cadáver Manuel Lacosta, desnudo, con la presencia de dos cuchilladas en su cuerpo.
Detención y juicio
Jesús Lacosta fue detenido en San Adrián del Besós, Barcelona, huyendo de la justicia, donde se había gastado parte del dinero en juegos.
El juicio se celebró el día 2 de marzo de 1956, aunque el día anterior Jesús quiso suicidarse y fue llevado al juicio en ambulancia. La sentencia se produjo el día 9, a la que se tuvo en cuenta el atenuante de ser menor de edad.
Jesús Lacosta fue condenado a 17 años, 4 meses y un día de reclusión menor por asesinato con alevosía, premeditación y desprecio de morada; por robo a 6 años de prisión menor y diversas multas por escándalo público e inhumación ilegal.
Antonio Conejero fue condenado a 6 años y un día de presidio mayor por encubrimiento de asesinato; por el delito de receptación a 2 años, 4 meses y 1 día de presidio menor y por el delito de inhumación ilegal a 2 meses y 1 día de arresto.
La tía de Lacosta condenada a 4 meses y un día de arresto mayor como encubridora de robo y absuelta como encubrimiento de asesinato.
Antonio Gómez fue el único personaje de todos los que habían sido detenidos que quedó absuelto.
REPERCUSIÓN POSTERIOR
… Fueron muchos los medios informativos que se hicieron eco de este homicidio como ABC y La Vanguardia en diversas informaciones y artículos.
… También fue importante la aportación de un programa de radio YA, fundada en el año 2016, con el título “La noche de autos” en su emisión número 28 en noviembre del 2017, en forma de video, además de la publicación de un libro y de videos sobre este tipo de casos, por especialistas en esta materias.(Ballesteros, Tatiana; Francisco José Fernández-Cruz Sequera; Jorge García Vergara y Elizabeth Pérez)
