Virgen de las Viñas Tomelloso
Cuadernos Manchegos
Cuadernos Manchegos

En este artículo pasamos revista de añoranza sobre los juegos más frecuentes que se realizaban `por nuestros abuelos actuales de los años 30 al 50 que, desde luego, no tiene nada que ver con los actuales, no existiendo ningún tipo de comparación, pues actualmente los juegos en la calle de los niños de aquella época únicamente existe la similitud de poder disponer de columpios en los parques, por ejemplo, pero observando de forma especial los juegos en que no se necesitan instalaciones  se encuentran olvidados y nuestros hijos y nietos los desconocen totalmente,  por no haberlos realizado nunca y se hace necesario agradecer a algunas asociaciones, colegios y grupos  que todavía intentan hacer recordara los muchos juegos en los que los niños se entretenían en la calle.

No incluimos aquellos juegos que se llevaban a cabo en las casas en momentos de entretenimiento, cuando prácticamente era la radio el único medio de comunicación externa que existía recordando que la televisión se instauró en España en el año 1956.

Por tanto, era frecuente que los muchachos anteriores a esas fechas utilizaban su tiempo libre jugando con sus amigos, compañeros o vecinos de barrio a ciertos juegos de entretenimiento con el que se utilizaban pequeños instrumentos muy sencillos incluso de confeccionar de forma propia e ingeniosas formas tanto para chicos, otros para chicas y juegos conjuntos.

Tendríamos que ampliar diciendo que en esos años los muchachos tenían pocos medios de desplazamiento y su radio de acción se limitaba a la zona donde habitaban con sus padres o en los barrios vecinos y que, además, se hacían frecuentemente a diario después de la merienda de la abuela o de la madre.

¡Venga iros a jugar a la calle!, eran expresiones frecuentes en aquellos años.

El nombre de los juegos era considerablemente amplio, muy sencillos de jugar y de forma muy infantil. Los juegos más típicos eran variados y muy conocidos. ¿Qué diferencia existe entre los juegos actuales a los de ahora en cuanto a su estructura? Pues fundamentalmente que en aquellos tiempos se disponía de menos dinero en general porque los medios eran más austeros, los recursos más escasos y entonces la calle era el lugar preferido, porque además era más segura que en los tiempos actuales.

 De igual forma la juventud se entretenía con cualquier cosa e inventaban juegos con diversos instrumentos, cosa o pieza encontrada, como aprovechamiento de recursos caseros o de la propia calle- recuerden las tabas, los tacones de los zapatos y otros-, aspecto que hoy en día no sería posible porque no somos capaces de aprovechar todos lo que no tiene aprecio sino es comprándolo para consumirlo.

Quién no recuerda los nombres de los juegos más acostumbrados como: La comba; Tú la llevas; el escondite; las canicas, La trompa; La peonza; Las tres en raya; Las cuatro esquinas, El yo-yo, Saltar el burro, El corro, La comba, Los cromos y otros muchos.

Aunque en próximos artículos describiremos algunos de ellos, en este haremos una mención especial a las canciones que se entonaban acoplados a distintos juegos y que para los mayores será un grato recuerdo.

En los recuerdos también se incluyen canciones o cánticos por todos recordados de distinto tipo y estilo. Siendo los más frecuentes los juegos de chicas y recodaremos algunos que más actividad tenían.

 Por ejemplo, el juego de “La Comba” era uno de los más frecuentes con canciones como:

 “Al pasar la barca;

 me dijo el barquero,

las niñas bonitas no pagan dinero;

 yo no soy bonita;

 ni lo quiero ser;

 tome usted los cuartos;

y a pasarlo bien”.

Así como en el Corro de la patata con canciones como:

 “Mambrú se fue a la guerra;

mire usted, mire usted que pena;

 Mambrú se fue a la guerra;

no sé cuándo vendrá;

do-re-mí, do-re-fa”.

También el juego como:

 “Pase-misí; pase-misá;

 por la puerta de Alcalá;

los de adelante corren mucho;

 los de atrás se quedarán”.

Otro no menos conocido era:

Estaba el señor don Gato;

sentadito en su tejado;

 marramamiau, miau, miau;

sentadito en su tejado.

Ha recibido una carta;

 por si quiere ser casado;

 marramamiau, miau, miau;

 por si quiere ser casado.”

Otro no menos popular como:

“El patio de mi casa es particular;

 cuando llueve se moja;

 como los demás;

agáchate y vuélvete a agachar;

 que los agachaditos no saben bailar”.

Añadimos, además:

“Cú cú cantaba la rana;

 cú cú debajo del agua;

 cú cú pasó un caballero;

cú cú de capa y sombrero”

Incluimos este otro, también muy popular:

Estaba la rana sentada;

 cantando debajo del agua;

 cuando la rana se puso a cantar;

 vino la mosca y la hizo callar”.

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