Virgen de las Viñas Tomelloso
Cuadernos Manchegos
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Tener una estructura financiera y claridad entre los ingresos y gastos personales es una forma de entender hasta dónde podemos llegar. Por un lado, deberás saber cuáles son los gastos de primera necesidad y que no puedes reducir, y por otro, deberás saber qué gastos corresponden con actividades de ocio o gastos extras. Este ejercicio financiero te ayudará a detectar pagos innecesarios y que te permitirán ahorrar y planear inversiones más rentables.

El equilibrio económico es la clave del bienestar, saber organizar y mejorar las finanzas personales tiene un impacto directo en tu calidad de vida. Crear el hábito de ahorrar puede ser difícil al principio, si no se tiene control de las finanzas puede hacer que terminemos gastando el dinero a la primera oportunidad, por eso es importante siempre tener un "fondo de emergencia", algo de dinero para ayudarte a recuperarte de un golpe financiero o emergencia. Lo ideal es tener al menos el equivalente a tres meses de tu presupuesto en una cuenta de ahorro.

Para que puedas organizar mejor tu economía presente y futura, te vamos a dar 5 útiles consejos que todo el mundo debería aplicar en su día a día, con el objetivo de organizar su vida financiera y encontrar la tranquilidad económica y disfrutar de los placeres de la vida sin tener que preocuparte excesivamente por el dinero.

1. Controla todos tus ingresos y gastos

Tener bajo control todos tus ingresos y gastos es algo fundamental, algo que deberían enseñarnos en la escuela desde bien pequeños. Si no sabes cuánto ganas y gastas de forma fija cada mes, es bastante probable que tu dinero desaparezca de tu cuenta sin saber cómo o por qué.

Es muy importante tener todo bien atado y controlar cada céntimo que entra o sale de tu bolsillo. En la actualidad existen decenas de herramientas que te permiten conocer al detalle tus finanzas personales, desde aplicaciones para móviles o para ordenador hasta la típica hoja de cálculo que puedes hacer tú mismo si manejas con soltura el Excel.

2. Reduce los gastos

Con tus gastos e ingresos bien controlados te será muy sencillo detectar donde se te va el dinero y si es posible mejorar tus finanzas. Los gastos fijos como hipoteca o préstamos son difíciles de reducir, pero sí que puedes ahorrarte unos euros en las facturas de internet, agua, luz y otros servicios si aplicas consejos de uso eficiente o buscas alternativas más baratas.

Por otro lado, los gastos innecesarios o extras de cada mes se pueden reducir potencialmente con un poco de esfuerzo. Tampoco se trata de no salir a cenar si te apetece y te lo puedes permitir, pero sí se debe encontrar un equilibrio entre gastos extras y ahorro.

3. Ahorrar bien es indispensable

La mayoría de personas saben que ahorrar es necesario, pero no todos son capaces de hacerlo. No solo debes saber que ahorrar es indispensable, sino que debes saber cómo hacerlo. Ahorrar e invertir son dos palabras que deben ir de la mano, ya que si sabes cómo invertir tus ahorros podrás sacarle rentabilidad para aumentarlos sin tener que hacer nada. Eso sí, te aconsejamos no arriesgar demasiado, lo mejor es que metas tu dinero en productos de bajo riesgo como las cuentas de ahorro, los depósitos a plazo fijo o los seguros de ahorro.

4. Crea un fondo de emergencia

Tener un fondo de emergencia para gastos inesperados es algo que la mayoría de españoles no tenemos. Puede parecer que nunca pasa nada o que todo está bajo control, pero los imprevistos suceden tarde o temprano. Desde adquirir una nueva lavadora hasta una reparación importante de tu vehículo. Para asegurarte de que siempre tienes dinero para este tipo de gastos inesperados, deberías tener un fondo de emergencia que sea igual a tres meses de tu sueldo.

5. Diseña un plan para deshacerte de tus deudas

Las deudas son una de las grandes losas de las finanzas personales. Los préstamos son una herramienta financiera muy útil si sabes cómo utilizarla, pero también muy peligrosa. No te metas en préstamos innecesarios y procura finiquitarlos cuanto antes. Si tienes varios préstamos o tarjetas de crédito, vete deshaciendo de ellos de forma paulatina, priorizando aquellos en los que más intereses estás pagando.

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