Las Lagunas de Ruidera, una belleza natural que mantiene escondido su secreto y que supone una sorprendente presencia en las tierras de Castilla-La Mancha.
Hemos recorrido este fin de semana las Lagunas de Ruidera en una ruta que debería ser patrimonio del turismo, comenzando desde del Pantano de Peñarroya y terminando en la Laguna Blanca, pasando por el Baño de las Mulas.
En primer lugar demostrar que la belleza de estas masas de agua enternece a cualquier amante de la naturaleza, pues se demuestra en sus aguas cristalinas y los fondos de su profundidad que proporcionan una tonalidad de agua desde los tonos verdosos a los azulados, la impresionante maravilla que proporciona la naturaleza pura y que ya a simple vista infunden armonía y serenidad.
Desde luego el entorno de las lagunas ha ido mejorando poco a poco con las mejoras que se han realizado en cuanto a las rutas de los paseantes y a las limitaciones de acceso a algunas zonas restringidas que hacen que las rutas indiscriminadas que hace tiempo estaban produciendo un serio destrozo en la vegetación autóctona de los ribazos de las lagunas, así como una pérdida de flor autóctona se hayan podido paliar de alguna forma.
Siendo fin de semana las lagunas estaban completamente ocupadas por personas de todos lugares que se permitían aprovechar la excelente subida de los niveles del agua- como se puede apreciar en la Laguna La Redondilla, una de las lagunas que en muchas ocasiones se encuentra a niveles mínimos de agua, pero que este año presenta una vista espectacular- que permiten aprovechar lugares de descanso y esparcimiento como rutas guiadas, barcas de remos, patines de agua y en ciertas zonas la posibilidad de darnos un buen baño.
La infraestructura de las lagunas es excelente, pues lugares para alojamiento, comidas existen bien acondicionados, además de los numerosos chalets vacacionales de las distintas localidades próximas a ambos lados de las dos provincias de Ciudad Real y Albacete.
Las opciones son variadas para pasar unos días de ocio y de aventura si se quiere, pues además de la oferta turística de rutas programadas, existe la posibilidad de visitar lugares curiosos e interesantes como el Castillo de Rochafrida, la Cueva de Montesinos, la Quebrada del Toro, la maravillosa vista que proporciona el alto de la Cruz de las Monjas, así como subir a la Mesa del Almendral en la Laguna La Batana, o también la oportunidad de los restos de la Central Eléctrica de Ruipérez y la Ermita de San Pedro en la laguna del mismo nombre, completando la visita con la visión de las numerosas cascadas como la del Hundimiento que se debe visitar.
En definitiva las posibilidades turísticas de Las Lagunas de Ruidera permiten unas vacaciones que posiblemente en un mes se hagan cortas porque la posibilidad de disfrutar de lugares frescos, al lado del agua y las diferentes oportunidades de ocio, recreo y esparcimiento hacen que sea uno de los lugares de mayor atracción turística a largo plazo de Castilla- La Mancha.
En este verano del año 2021 las Lagunas ofrecen en todo su esplendor la verdadera razón de la naturaleza y de su enriquecimiento y también el deporte de la pesca, que aunque regulada permite poder ejercer esta modalidad entre más de 20 especies de peces.
De igual forma el Pantano de Peñarroya presenta este verano un gran aspecto por estar a su máxima capacidad de 50 hectómetros cúbicos, al mismo tiempo que se puede visitar su museo natural y su castillo de origen árabe, así como la ermita de la Virgen de Peñarroya.
Admirable belleza de este conjunto turístico-artístico, de ocio y esparcimiento que en este verano permite contemplarlo con todo su esplendor y belleza natural.
