María Cobos, nutricionista del Hospital de Tomelloso, ha explicado que debido a los cambios fisiológicos y al deterioro cognitivo que producen las enfermedades neurodegenerativas estos pacientes son candidatos a una alimentación inadecuada.
La información nutricional y el soporte familiar son acertadas estrategias para prevenir los efectos indeseables de enfermedades como el Parkinson o el Alzheimer.