Virgen de las Viñas Tomelloso
Cuadernos Manchegos
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De nuevo el representante del covid me ha pasado aviso de querer volver a tener contacto conmigo. Supongo que cuando lo hace es porque debe estar satisfecho de alguna victoria que ha obtenido en la estrategia de hacernos la vida imposible, pero como tantas veces yo tengo mis buenas noticias que estoy seguro no va a poder rebatir.

En fin, me dirigía al lugar indicado y pude comprobar que no había sido sustituido como el anterior y que seguía en su aposento de directivo de la campaña de Tomelloso, que según me han indicado de buenos  genes se ha convertido en la zona comarcal del virus.

- Buenos días, me alegro enormemente que haya atendido mi aviso  y supongo que estarán ustedes muy preocupados por el nuevo horizonte que presenta nuestra lucha contra sus cuerpos y que conste que ya le advertí que proseguiríamos nuestros ataques por otras zonas de sus cuerpos vitales.

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- Sinceramente no sé a qué se refiere y le veo excesivamente ufano y que creo que no tiene ningún motivo para estarlo, así que espero que se explique con más claridad para que pueda contestarle con mayor criterio.

- Desde luego los humanos cada vez me asombran más con sus formas de pensar. ¿Es que por un lado no se han enterado de nuestro nuevo ataque dirigido a la juventud y por otro el eficaz trabajo que estamos haciendo disminuyendo la eficacia de sus vacunas? ¿O es que estas cuestiones todavía no entran en sus cabezas ilusas?

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- Desde luego su desconcierto es total. No entiendo el porqué de tanta satisfacción, cuando cada vez estamos en una situación de avance con la administración de vacunas y ya estamos comprobando que la eficacia de los ataques de sus huestes víricas se van debilitando poco a poco y estamos consiguiendo adelantarnos a sus perversos ataques, porque pensamos que ya no saben ustedes qué hacer y especialmente en nuestra tierra castellano-manchega con unos datos exitosos y, la verdad, no quisiera enfadarle, pero sus jefes superiores seguramente le habrán dado algún toque de aviso, porque comparado con otras regiones su ejército está perdiendo fortaleza.

- Necesariamente no tenemos ninguna razón para entendernos, pero sí me gusta conectar con los seres humanos para darme cuenta la gran falta de previsión que tienen ustedes, ¿pero n o se dan cuenta que lo que está ocurriendo en una táctica premeditada para que ustedes se vayan confiando y bajen sus defensas? Ya podrá comprobar cómo dentro de un mes  o algo más va a ser usted el que me pida entrevista, porque las cosas no habrán mejorado.

- Estoy convencido de lo contrario, porque cuando las vacunaciones sean masivas, que ocurrirá dentro del periodo que usted ha establecido, sus estirpes de virus tendrán que decaer y convertirse en pequeñas amenazas que vamos a superar.

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- Bien, bien ¿así que eso piensan? Le voy a dar un consejo que no debiera hacerlo, pero sería prudente y conveniente que vayan pensando en hacer stockaje de vacunas y mejorar la calidad de las que ahora están  utilizando, porque cuantos más dificultades nos pongáis, mayor virulencia estableceremos en nuestros futuros ataques, así que mi consejo téngalo en  cuenta, porque nosotros ya estamos preparando nuestras reservas y nuestra stockajes para ese tiempo que le he advertido.

- Quisiera devolverle  la opinión que usted tiene de los humanos y por sus palabras le voy a devolver el saludo advirtiéndoles que conocemos mejor a sus virus   que ustedes a los humanos, porque si usted hace cuentas de la cantidad de virus  que han invadido a nuestra población a lo largo de siglos, siempre hemos conseguido casi eliminarlos y hemos dejado un pequeño remanente de algunos virus hostiles que se empeñan en querer perseguirnos todos los años, pero que felizmente no suponen una amenaza integral.

- Siguen ustedes sin darse cuenta que nosotros no tenemos ningún interés por adelantado de molestar, ni interferir en la vida ni en los cuerpos de los humanos y precisamente son ustedes los que se introducen en nuestro pequeño mundo  y nos obligan a permanecer en él, sin que por nuestra parte hayamos puesto ningún medio intencionado para conseguirlo.

- Sí, sí, pero en ese pequeño mundo que ustedes dicen que se manejan en origen se convierten en verdaderos bárbaros, salvajes, cuyo único motivo es destruir sin conocimiento.

- No debería permitirle tal aseveración, pero tales expresiones están fuera lugar, porque nuestra actitud simplemente es sobrevivir y para ello necesitamos alimentos y a eso únicamente nos dedicamos.

- Bien, pues que conste que ya hemos advertido a los humanos  y, como estaremos todavía en activo, dentro de ese mes espero que sea usted el que pida una nueva entrevista.

- Pues así quedamos y así podremos comprobara nuestros propios razonamientos.

- Pues eso veremos.

- Hasta la próxima.

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