Ya hemos reseñado las distintas formas de aplicar un número a nuestros portales, casas y viviendas en los casos más habituales de cerámica y metálicas, pero la existencia de otro tipo de numeraciones es frecuente encontrarlas en otras ocasiones dentro de un grupo que hemos clasificado como heterogéneo y que suelen ser menos usuales que los dados en anteriores grupos estudiados.
A pesar de los ejemplos y modelos que vamos a presentar en este artículo es indudable que no son los únicos, puesto que si hubiera que hacer relación de las distintas formas habría que hacerlo de pequeños artículos, pero en gran cantidad, pues las variables son muchísimas y no solo porque sean novedosas, sino porque también nos encontramos distintas variantes en las ya explicadas, lo que alarga la correcta determinación de las que existen en Tomelloso.
Otros de los modelos que hemos encontrado se encuentran encuadrados en aquellos que se utilizan materiales de los más utilizados en obras como material de construcción elemental y nos estamos refiriendo a los números realizados con cemento o masas arcillosas o mezclas de distintos tipos de estos materiales.
Estas placas normalmente sobresalen de la fachada y están realizadas exprofeso para este tema y realizados en las mismo frontal por el constructor con sus materiales de obra y no suelen estar comercializados, sino simplemente con el estilo que se desee y se encuentra de forma más frecuente en los edificios reformados o casas de fachada nueva.
Una vez moldeada la masa la superficie suele ser cuadrada y en blando se diseña el número que suele aplicarse mediante plantillas de distinto formato de número.
Las placas son uniformes y no suele destacar el número del fondo de la masa original, salvo en algunos casos que se mejora la vista de la numeración aplicando alguna masa de pintura de un determinad color, aunque no es frecuente porque el efecto no suele ser el adecuado.
Otro segundo modelo muy llamativo y de una sensación más de presencia y notoriedad son las placas de baldosas de cerámica a las que se añaden posteriormente los números que pueden ser sobresalientes y bien adheridos, cementados o atornillados, donde abundan las baldosas de color oscuro-negro, marrón- y números generalmente blancos, aunque, como en todos los casos, pueden existir variaciones. La forma del mosaico suele ser cuadrada o algo rectangular y es muy frecuente que los números sean angulares y de formato recto. En algunos casos hemos encontrado chapas metálicas adhesivas del tipo dorado con número azul.
