EL CRIMEN DE LAS ESTANQUERAS DE SEVILLA
Como cualquier otro acontecimiento macabro como los que hemos presentado hasta ahora, los ciudadanos dieron una gran importancia a este asunto, al igual que los medios de información, añadiendo en esta ocasión unas especiales circunstancias que concurrieron en la determinación de las causas de los asesinatos, así como muy transcendente el enjuiciamiento y resolución del caso, que, incluso una vez resuelto, aún quedaron dudas sobre las particularidades de tan siniestro suceso.
¿Cómo fueron los hechos?
Dos hermanas aparecieron asesinadas en el estanco que regentaba una de ellas, con heridas de arma blanca.
¿Cuándo se produjeron?
El hecho se produjo el 11 de junio del año 1952.
¿Quiénes fueron los personajes?
*** Las asesinadas
Las hermanas Matilde y Encarnación Silva Montero de 50 y 55 año,s respectivamente.
*** Los supuestos asesinos
… Lorenzo Castro, alias El Tarta, por ser tartamudo.
… Juan Vázquez Pérez, el Mellao
… Antonio Pérez Gómez
¿Cuál era la situación de cada uno de los fallecidos y de los delincuentes?
… Matilde Silva, era soltera, nacida en Estepa (Sevilla) y regentaba la titularidad del Estanco, situado en los bajos de su domicilio en la Avenida Menéndez Pelayo de Sevilla.
… Encarnación Silva, nacida también en Estepa y soltera, que era cajera en los almacenes “El Águila” de la Calle de Sierpes y que se encontraba en el lugar con su hermana.
…Lorenzo Castro, Juan Vázquez y Antonio Pérez, eran frecuentes delincuentes que se dedicaban a pequeños robos y hurtos.
¿Cómo sucedieron los hechos?
De acuerdo con la resolución del juzgado, los tres supuestos asesinos se presentaron a la hora del cierre en el estanco con la intención de robar, a lo que Matilde se negó y recibió numerosas puñaladas. Al oír los ruidos su hermana salió de la habitación y fue igualmente recibida con puñales recibiendo unas 13-16 puñaladas y posteriormente salieron del establecimiento.
La detención de los delincuentes
El día siguiente, un sobrino de las estanqueras se presentó en el lugar extrañado de que sus tías no hubieran acudido a una boda a la que estaban invitadas y, extrañado, abrió la puerta y se encontró a sus tías en el suelo, muertas.
Dio parte en el juzgado y, dado lo particular de los hechos, se comenzaron a realizar las pesquisas necesarias.
Se descartó la posibilidad del robo, puesto que el dinero se encontraba intacto y las primeras impresiones tendieron a pensar en el propio sobrino y en un carnicero.
No obstante, mediante las acusaciones de varios delincuentes y el soplo de algunos colegas, enfocaron sus dudas hacia los tres personajes, cuya búsqueda comenzó rápidamente.
A primeros de julio fue detenido Juan Vázquez, que, alistado en la Legión, pretendía ir a Melilla y que delató a sus compañeros y al mismo tiempo también fue detenido Lorenzo Castro, que se había escondido en un pajar y que fue incendiado por la policía para que saliera. El tercer detenido fue encontrado en Madrid.
Los tres fueron encerrados en la Prisión Provincial de Sevilla, llamada “La Ranilla”.
Los tres apresados se acusaron unos a otros y se desdijeron continuamente en sus declaraciones.
Juicio y penitencia
El juicio oral tuvo lugar dos años después durante los días 20 al 22 de octubre de 1954.
El 26 de octubre se dictó sentencia de penas de muerte en los juzgados y, aunque se solicitó la conmutación de la pena por mucha gente del pueblo y personajes importantes, entre ellos el alcalde de Sevilla y el obispo, no fue concedida, por lo que la sentencia pasó al Tribunal Supremo en julio de 1955 y quedó ratificado en marzo de 1956, para que fueran cumplidas las penas.
El 4 de junio de 1956 fueron ejecutados a Garrote Vil en la Prisión de “La Ranilla” y posteriormente sepultados.
HECHOS POSTERIORES
Se produjeron numerosos desacuerdos, ya que se pensaba que habían sido ejecutados siendo inocentes, ya que se planteaba que era muy extraño que no se hubieran llevado nada de dinero, pues aparecieron intactas 600 pesetas y un fajo de billetes de 5.000 pesetas, lo que no era normal entre ladrones, como tampoco haber encontrado los cuchillos
Sin embargo, la prueba definitiva se produjo 20 años después, cuando una persona declaró ante un sacerdote, que precisamente había estado en los juicios de entonces, que él había sido el asesino de las mujeres, guardando el secreto del juramento, por lo que se sigue sin saber quién fue el asesino, pero que conllevaba la teoría de que se había sacrificado a unos inocentes.
También existió otro supuesto, de donde se opinaba que estas mujeres habían delatado en su pueblo, en tiempo anterior, a algunos personas de izquierdas que terminaron en el paredón y se había producido el asesinato por un personaje que vino del extranjero para cumplir una venganza.
REPERCUSIÓN POSTERIOR
Los hechos tuvieron un clamor de interpretaciones y de discusiones que dieron lugar a distintas promociones de narración de los hechos.
… Manuel Rojo Cabrera escribió un libro titulado “El proceso por la muerte de las hermanas estanqueras”.
… El director Ricardo Franco, en la serie de Televisión, serie 2, “La huella del Crimen”, realizó una versión de los hechos con el título de “El crimen de las estanqueras de Sevilla” en el año 1991.
… Alfonso Grosso escribió una novela titulada “El crimen de las estanqueras”.
Transcripción de la declaración en secreto de confesión
"Quiero confesar que hace casi 20 años fui yo quien asesinó a las estanqueras. No me arrepiento por ellas, sino por esos tres hombres que pagaron por un crimen que no había cometido".
