Este Palacio se encuentra situado en la calle Mayor de Madrid en el número 69, esquina con la calle de Sacramento, popular, famosa y céntrica calle de Madrid. También se le conoce como el Palacio del Marqués de Camarasa y es uno de los palacios más antiguos de Madrid, pues data del siglo XVI-XVII.
Su relación con nuestra región procede de la concesión de un título nobiliario con este nombre concedido por los Reyes Católicos a Juan Hurtado de Mendoza y Guzmán, como inicialmente se conoció al primer marqués de Cañete. Este hombre fue mayordomo de Enrique III y realizó funciones de ayo de Juan II(recordamos que fue el padre de Isabel I, futura Reina Católica por su matrimonio con Fernando de Aragón), por cuyos servicios prestados al reino fue entregado el marquesado de Cañete.
Es curioso que este primer teóricamente primer marqués de Cañete, no lo fue realmente hasta el año 1530, adjudicado a su nieto Juan Hurtado de Mendoza y posteriormente reconocida como Grandeza de España. Hay que señalar que esta familia tenía gran tradición de linaje, ya que en principio así eran denominados señores de Cañete, ostentando el cargo de alcalde de Cuenca, pasando a ser marqueses con posterioridad. También en esta familia arraigada en Cuenca se encontraban personajes de grandes servicios militares a los reyes como Andrés Hurtado de Mendoza y Cabrera, II Marques de Cañete.
Nuestro Palacio pasó posteriormente a tener distintas reformas y fue sede y residencia de distintos personajes ilustres como algunos gobernadores y alcaldes de Madrid.
Finalmente en el año 2010 fue rehabilitado y se conformó un acuerdo de cesión a treinta años al Centro de la Sefarad-Israel, como consorcio por ese período. Además en el edificio existe la sede de la Casa de Asia y también la Fundación Japón, así como las Oficinas de la Agencia Tributaria Municipal y a la sede del Club Madrid.
Tuvo distintos propietarios pasando al duque de Nájera, al marqués de Camarasa y el en siglo XIX bajo la titularidad del Estado y finalmente del Ayuntamiento de Madrid.
El título de marqués de Camarasa fue otorgado por Carlos I a Francisco de los Cobos, secretario del rey, casado con la marquesa de Camarasa de procedencia aragonesa, aunque el nombre de Camarasa procede a la provincia de Lérida, título hoy integrado en el casa de Medinaceli.
El duque de Nájera, fue una adjudicación que realizó Isabel, la Católica a Pedro Manrique de Lara y Sandoval en agradecimiento de servicios prestados y que posteriormente le fue adjudicada la Grandeza de España.
Curiosidades
Esta palacio tiene varios aspectos que pueden considerarse como especiales o diferentes.
En primer lugar que el edifico ocupa un solar completo de Madrid, rodeados por la calla Mayor, calle Sacramento, Duque de Nájera y calle Traviesa, estas dos últimas muy estrechas.
El edificio es de dos plantas y en su interior existe un patio ajardinado que se puede ver desde la calle Sacramento y se ha colocado una imagen de la virgen Esther, en representación de los judíos.
En otro aspecto interesante existe una leyenda sobre este edificio que se ha denominado como la Leyenda de la Mano Cortada, que nos puede resultar curiosa para los manchegos.
La leyenda habla que el marqués de Cañete murió asesinado al morir atravesado por una espada, mientras se encontraba en presencia de un clérigo que fue acusado y condenado a la horca, así como le fue cortada una mano como castigo ejemplar que fue colgada en la pared en lugar visible.
A partir de ese momento se comenzó a decir que aparecían los espíritus del marqués y del clérigo, aunque posteriormente un criado del marqués confesó que fue él mismo el que mató a su amo, aduciendo que el marqués intentó seducir a su mujer. A partir de entonces cesaron por completo las apariciones y hechos insólitos, aunque fue costumbre habitual durante mucho tiempo santiguarse antes de entrar al edificio.
