En toda la zona que abarca al Parque Natural de las Lagunas de Ruidera existe un sistema complejo donde podemos encontrar una gran diversidad de áreas naturales: Geológicas, geográficas, del reino Vegetal y también del reino animal, tanto vertebrados como invertebrados y, entre ellos, se encuentran clasificados los insectos.
El número de insectos que viven, merodean o pasan por la zona abarcada por La Lagunas es innumerable y cada año puede sufrir modificaciones , fundamentalmente influidas por la climatología y también por la acción antropológica de la dinámica de generación de visitas de turistas y otras acciones humanas,
Vamos a describir alguno de los más interesantes por su abundancia o por su peculiaridad, haciendo la observación pertinente que estos insectos que vamos a enumerar y describir no son únicos de la zona de las lagunas, sino que podemos encontrarlos en otras localizaciones, pero lo que sí es evidente y seguro que están, existen, conviven o merodean este espacio natural.
Todos los expuestos en estos pequeños artículos tratan de dar una imagen de la dinámica vital de la naturaleza en todo su contexto con un estudio integral de la diversidad que muestra la vegetación y la geomorfología de cualquier zona, paraje, sistema o determinación geográfica específica.
Por lo tanto se trata de dar una imagen del potencial existente para poder servir de base de estudios más en profundidad y de mayor investigación, en el caso que estos trabajos no estuvieran realizados o bien que pudieran aportar alguna novedad o visión distinta de las existentes.
Así, en breves artículos iremos presentando muestras de los distintos tipos de habitantes de las lagunas desde vertebrados e invertebrados, asó como algún artículo sobre hongos y setas y añadiremos por último uno o varios artículos sobre plantas especiales que no hayan sido nombradas en los artículos específicos dedicados a las lagunas.
Hemos iniciado con los insectos por ser los más olvidados y los menos conocidos por la especial poco atención que solemos prestar a este tipo de animales, ya que además a vista de los humanos son los más incómodos dañinos y peligrosos, porque dan la impresión de no aportar nada positivo a la naturaleza, cuando en realidad son de los que más marcan la evolución de las masas vegetales existentes, así como también el grado de evolución de la calidad de nuestros paisajes.
Hemos encontrado dos especies de este insecto: Agapanthia cardui y Agapanthia irrorata. Estos insectos se reconocen con facilidad por disponer de unas antenas muy largas, donde su colorido va alternando a medida que se disponen en longitud, alternando sucesivamente el color negro y el amarillo o blanco. El cuerpo es alargado de color negro y con machas y dibujos blancos o de otros colores y en el caso de la Agapanthia cardui , una línea vertical blanca a lo largo de su cuerpo. Estos insectos es relativamente localizarlos pues suelen encontrarse con faciliadad en las hojas de los cardos, de donde se alimentan.
Aunque se parece bastante a las avispas por sus colores negros y amarillos, no hay que preocuparse corresponde a una simple mosca y además menos molestas que las moscas comunes, además su vuelo es más normal que el continuo movimiento extraño de las avispas.
La diferencia entre las avispas y otros insectos parecidos o similares se pueda apreciar con facilidad, porque las avispas tienen la cintura -parte entre el tórax y al abdomen- estrechada. La especie de la fotografía es Allantus viennensis y es totalmente inofensiva.
Este insecto es inconfundible por su parte final del abdomen encorvado, elevado y de color naranja en el centro y negro en su parte última. No es peligrosa y su nombre técnico es Ammophila sabulosa.
En general se aprovechan de néctar de las flores y en ellas es fácil encontrarlas en pleno verano. Esta avispa tiene la particularidad de cuando tienen que depositar los huevos realiza un agujero en la tierra y captura con su aguijón distintos insectos y larvas que entierra junto a los huevos y luego lo tapa con piedras, con el fin de asegurar la alimentación de las larvas en el futuro.
Como se puede comprobar tienen toda la forma, tamaño y presencia de una abeja. Su nombre técnico es Andrena vaga y es una especie de abeja de las denominadas solitarias, porque no hacen nidos comunes, ni colmenas, aunque en algunas ocasiones existan muchos nidos próximos. El cuerpo es peloso en casi todas sus partes de color blanquecino y sus patas igualmente disponen de gran vellosidad lo que les permite poder transportar granos de polen. Se alimentan del polen de las flores y hacen sus nidos en la tierra en un profundo agujero redondeado con un resalte en su superficie o boca.
Este pequeño insecto da la sensación de ser una abeja cuando en realidad es una simple mosca de ahí su nombre común, pero asusta porque en su vuelo hace un zumbido especial. Simplemente de alimenta del néctar de las flores gracias a una probóscide de su boca muy alargada que parece un estilete en lugar de una trompa. Es de muy pequeño tamaño. Su nombre técnico es Bombilyus cruciatus.
Este insecto es muy parecido por sus colores y forma con las abejas, forma parte de un grupo de abejorros que, en este caso, se diferencia de los demás porque la parte final del abdomen es de color blanco. Tienen abundante pilosidad y un zumbido característico que produce vibraciones que hacen que la polinización de las flores se facilite. Sus alas son más cortas que el cuerpo y tienen dos bandas amarillas y una mancha negra central. Producen grandes colonias de abejorros y la única que tiene aguijón es la hembra. Su nombre técnico es Bombus terrestris
