La Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) y la Asociación Española de Investigación sobre el Cáncer (ASEICA) han presentado esta mañana ante el Ministerio de Ciencia e Innovación unas 660.000 firmas, para reclamar un Plan Nacional de Investigación en Cáncer, así como una serie de propuestas para evitar el deterioro del sistema científico español En concreto, ASEICA ha recogido 329.000 firmas y la AECC ha aglutinado 331.000.
En el informe “Comprometidos con la investigación en cáncer. Situación actual de la investigación e innovación en cáncer en España”, realizado por ambas entidades, ya se puso de manifiesto la necesidad de que España tuviera una Plan Nacional de Investigación en Cáncer que contemplara, entre otras medidas, duplicar los fondos de los último 10 años destinados a investigar el cáncer; potenciar el talento investigador; ajustar la investigación que se hace en España a la realidad epidemiológica del país; impulsar la innovación en cáncer; potenciar los ensayos clínicos no comerciales.
Ramón Reyes, presidente de la AECC y de la Fundación Científica AECC, ha señalado que “el coronavirus ha paralizado la investigación en cáncer y es necesario reactivarla porque salva vidas. Creemos necesario que España tenga un Plan Nacional de Investigación en cáncer que nos permita seguir aumentando los índices de supervivencia y que nuestro país sea competitivo en Europa”. Además, el presidente de la AECC cree que “existe una buena disposición de este Ministerio a trabajar en estas medidas y esta reunión es una buena muestra de ello”.
España sufre una disminución continuada de los recursos públicos dirigidos a la investigación, lo que compromete seriamente la competitividad de los grupos de investigación más punteros y la viabilidad de los equipos liderados por los científicos más jóvenes de nuestro país.
En este sentido, Xosé Bustelo, presidente de ASEICA, señala que “el presupuesto español para I+D+i está muy lejos del de los países de nuestro entorno, por eso es necesario incrementar la financiación de proyectos de I+D+i para remediar el atraso acumulado de los últimos quince años, y que está afectando seriamente a la viabilidad y competitividad de los grupos de investigación españoles. Lamentablemente, el Plan de Choque recientemente anunciado a quedado en un parche que aborda de forma muy tímida los problemas crónicos que nos aquejan”.
En opinión de ambas entidades, esta situación requiere de una combinación de medidas a corto y largo plazo, comenzando por hacer un “esfuerzo de financiación considerable” para recuperar el terreno perdido y alcanzar los objetivos comprometidos de la Estrategia de Lisboa 2020.
Esta situación, agravada por la crisis sanitaria del coronavirus, no ha hecho sino empeorar la situación de fragilidad social y sanitaria de los pacientes oncológicos y sus familias como colectivo doblemente vulnerable, por el cáncer y por la Covid-19.
Por ello, la AECC y ASEICA se muestran preocupadas por el impacto presente y futuro del cáncer si no se reactivan las capacidades de nuestro país para hacer frente a esta enfermedad, ya que cada año, cerca de 280.000 personas son diagnosticadas de cáncer en España y más de 112.000 fallecen, una media de más de 300 personas cada día.
13 propuestas AECC-ASEICA para la mejora la investigación en cáncer y el sistema de I+D+i español
Duplicar la inversión que se ha hecho en los últimos 10 años, que ha sido de 1550 millones de euros, hasta alcanzar los 3.000 en el 2030 contemplando:
Incrementar la financiación de proyectos de I+D+i que remedie el atraso acumulado de los últimos quince años y que está afectando seriamente la viabilidad y competitividad de los grupos de investigación españoles. Se han implementado medidas en el Plan de Choque del Ministerio, pero estas son claramente insuficientes ya que solo suponen una actualización a los niveles que se tendrían en 2010, no en la actualidad. Solventar esta situación requiere medidas excepcionales que incluyan, como mínimo, un incremento a corto plazo de un 100% de todos los programas de la Agencia Estatal de Investigación (AEI) y del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) destinado a la financiación de proyectos de investigación. Demandamos que este aumento en la financiación se haga en forma de subvención directa y no como créditos (los cuales no pueden ser solicitados por los investigadores académicos y hospitalarios)
Creación de otras formas de financiación estable en los OPIS como, por ejemplo, el “core funding” en función de los resultados de evaluaciones periódicas de los grupos de investigación pertenecientes a los mismos.
Solventar los problemas de financiación creados a los grupos de investigación por culpa de la implementación por el calendario de proyectos de la AEI. El desfase creado por este nuevo calendario hace que los investigadores que inicien sus proyectos de investigación estos dos próximos años queden sin financiación alrededor de ochos meses
Potenciar el talento investigador a través del apoyo específico a los jóvenes investigadores contemplando:
Aumento de las partidas destinadas a la formación y captación de talento tanto de la AEI como del ISCIII (p.ej., programas FPI y similares, Juan de la Cierva, Ramón y Cajal, Sara Borrell, Miguel Servet y Joan Rodés). Actualización de los salarios de cada una de dichas categorías. En el caso de categorías asociadas a jefes de grupo (RyC, Miguel Servet, J. Rodés), asociación de los contratos con ayudas de “start-up” similares a los de países de nuestro entorno que permitan la productividad a corto plazo de los nuevos IPs.
Ajustar la investigación que se hace en España a la realidad epidemiológica del país.
Impulsar la innovación en cáncer reduciendo esa travesía del desierto por la que se pasa en las últimas fases de la investigación.
Potenciar los ensayos clínicos no comerciales y facilitar la participación de grupos cooperativos en los mismos.
Fortalecimiento del CIBERONC y otras iniciativas de investigación cooperativas.
Favorecer y valorar la actividad investigadora en la carrera profesional del personal sanitario perteneciente al Sistema Nacional de Salud
Fortalecer la Agencia Estatal de Investigación mediante el incremento del personal y presupuestos plurianuales.
Simplificar los trámites burocráticos, los cuales están haciendo la vida de los científicos cada vez más complicada en cuanto a la gestión de sus proyectos de investigación. Esta simplificación intentó hacerse durante el año pasado por parte del antiguo Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, pero las medidas quedaron en papel mojado tras una nueva reglamentación realizada por el Ministerio de Hacienda
