Sin duda dos de los mayores éxitos de los tebeos y comics de los años 50-60 en esa época fueron casi con seguridad dos ediciones de personajes de Editorial Bruguera y concretamente El Capitán Trueno y Mortadelo y Filemón.
Mortadelo y Filemón, Agencia de Información, fueron y son dos personajes creados por el dibujante Francisco Ibáñez y que aparecieron por primera vez en el tebeo de Pulgarcito en el número 1.394 en el año 1958.
La forma de describir las aventuras de estos personajes llegó, y aun prosigue, a llenar un volumen importante de seguidores por narrar y describir una serie de aventuras y locuras totalmente disparatadas entre dos personajes totalmente diferentes no solamente en su forma de obrar, sino en sus características formas de vestir.
Al inicio de su edición ambos personajes actuaban como detectives privados, hasta que después de algunas publicaciones pasaron a crear una Agencia denominada T.I.A.- Agencia Secreta- que era la que promocionaba las aventuras.
Filemón hacía de jefe y era de nariz aguileña, chaqueta y sombrero de felpa-que posteriormente desapareció- y fumaba en pipa. Mortadelo, por su parte, vestía con gafas y levita negra, bombín y paraguas del mismo color y era alto y calvo.
Su forma de actuar era diferente: Filemón era de carácter muy fuerte y con frecuencia se encolerizaba, mientras que Mortadelo era un personaje con poco sentido común y con capacidad de poderse disfrazar con facilidad en diversos personajes e incluso animales.
Las aventuras eras disparatadas y absurdas que comenzaban con transgresión de la actuación de investigación y terminaba siempre de forma muy ocurrente y con accidentes de todo tipo e inimaginables, siempre con serios problemas para los protagonistas.
Las primaras ediciones eran de pequeña capacidad hasta que llegaron a editarse episodios de 44 páginas y hasta 2015 se habían publicado 200 episodios.
Los episodios de Mortadelo y Filemón pasaron por varias etapas, curiosamente de 10 años: 1958-1968; 1969-1979; 1980-1989 y 1990 en adelante y muchas de las colecciones de estos personajes fueron agrupados en la Colección Olé.
Además de nuestros dos personajes también se incluyeron otros protagonistas que aparecían con frecuencia en muchas de los episodios: el catastrófico científico, Bacterio; la oronda secretaria Ofelia y la atractiva Inma.
En definitiva lo más llamativo de los episodios y comics de los personajes es la continua lucha que mantienen para solucionar su propia torpeza en la forma de desarrollar sus actividades y que proporcionaban al público momentos de mucha diversión que es lo que produjo su éxito, porque además existían algunos puntos comunes en la mayoría de los episodios por las secuencias y continuas ocurrencias de las diversiones programadas.
::: He recuperado alguna información respecto al nombre final del comic, puesto que se propusieron primitivamente varias opciones curiosas y que merece la pena citar porque marca la increíble imaginación que se puede tener en el pensamiento de personas como Francisco Ibáñez: Mr. Cloro y Mr. Yesca, Agencia detectivesca; Ocarino y Pernales, Agentes Especiales; Lentejo y Fideino; Detectives Finos y Mortadelo y Filemón, Agencia de Persecución.
::: También se hicieron varias adaptaciones para televisión con algunos episodios de los personajes.
::: Mortadelo y Filemón han tenido durante su trayectoria numerosas celebraciones, homenajes y reconocimientos por distintos organismos y entidades como por ejemplo la edición de un sello de correos en el año 1997 de 35 pesetas de valor.
::: En el año 200 fue la mascota oficial de la Vuelta ciclista a España y en el mismo año se la calificó como Embajadores oficiales de la infancia en UNICEF.
::: También en homenaje a la popularidad existe una reproducción de estos personajes en el Museo de Carera de Madrid.
::: Para muchos que leímos estas aventuras debemos recordar que el fono de los dibujos: a las paredes, las esquinas, los adornos, siempre llevaban una representación curiosa, generalmente de escenas de animales que daban mayor diversión a las viñetas.
::: Muchas de las viñetas se adornaban con la aparición de arañas en las esquinas de los fondos, además de escenas generalmente de personas, animales o construcciones en posturas muy ocurrentes.
