La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), sindicato más representativo en las administraciones públicas y con presencia creciente en el sector privado, lamenta el incremento del paro en septiembre en 1.855 personas en Castilla-La Mancha hasta alcanzar los 125.184 desempleados, de acuerdo a los datos publicados hoy por el Ministerio de Trabajo y Economía Social.
El paro femenino en Castilla-La Mancha sigue siendo mayoritario (65,7%), pero es que hasta el 92,3% del empleo destruido en septiembre fue femenino con 1.712 mujeres más engrosando las listas del paro. Este comportamiento también se refleja en la afiliación a la Seguridad Social, donde hubo una pérdida de 1.000 mujeres cotizantes mientras se registraba un aumento de 1.015 afiliaciones masculinas.
La precariedad del empleo femenino también tiene su traducción en la contratación y la duración de la jornada: representa el 42,2% de los contratos indefinidos (el 73% a tiempo parcial) y el 59,6% de los contratos temporales (el 66% a tiempo parcial).
Tampoco ha sido un buen mes para los servicios públicos de Castilla-La Mancha: las actividades sanitarias y de servicios sociales han perdido 1.863 cotizantes; la educación ha visto reducida su afiliación en 1.063 personas y la Administración Pública y Defensa lo ha hecho en 1.773 cotizantes. En total, los datos de la Seguridad Social reflejan una pérdida de 4.699 puestos de trabajo en estos ámbitos.
Una vez más, CSIF reclama la devolución de los 43,4 millones de euros concedidos por parte del Gobierno regional a CCOO y UGT desde 2014. La Central Sindical denuncia la práctica de subvencionar a los sindicatos de clase mientras se mantiene una política de recortes que afecta a los empleados públicos y a la ciudadanía. La devolución de esta cantidad serviría para reforzar los servicios públicos y para hacer frente a los ámbitos más precarizados del mercado laboral de la región.