TOLEDO
En la capital de la Comunidad Autónoma podemos disfrutar de la presencia de nuestro ingenioso hidalgo en una de las posturas que podamos calificar como de las más originales, no por su estructura física, sino por su porte y gallardía, pues don Quijote se nos presenta con arrogancia y empaque.
Es una de las estatuas de la ciudad más buscadas por los visitantes por la posibilidad de hacerse fotografías.
La estatua en pie se encuentra a la salida del pórtico de Santa Cruz en el tramo que comunica con la Plaza de Zocódover.
Esta realizada por el escultor madrileño Óscar Alvariño Belinchón y fue colocada en el año 2006 como otras muchas obras con la conmemoración del fallecimiento de hacía cuatrocientos años del fallecimiento de nuestro genial escritor.
La estatua tiene una dimensión de 2 metros de altura y está terminada en bronce.
La estatua de Cervantes se encuentra con la indumentaria habitual de la época y con su brazo derecho ajustando su mano a la cintura y en la mano izquierda manteniendo un libro por el lomo a la altura del corazón. La cabeza está girada a su derecha.
Da la impresión de estar dispuesta para hacerle una foto de artista.
Es cierto que, en Toledo, como también en otros muchos lugares, hay establecimientos comerciales donde existen reproducciones de don Quijote, que, aunque obras menores, pueden considerarse como verdaderas obras originales y que pueden valorarse como un valor añadido a Cervantes.
Guadalajara
También en la capital y concretamente en la Glorieta Hispano Americana nos encontramos con un monumento a don Quijote, que está realizado por el escultor Eloy Teno en hierro y la estatua aparece en posición frontal.
Fue inaugurada en el año 2004.
Sobre un pedestal de mármol se encuentra grabado el nombre de “Quijote”.
Don Quijote aparece en pie sobre el pedestal con la lanza y escudo en posición frontal.
En un lateral del pedestal aparece una leyenda que dice:
“La ciudad de Guadalajara en homenaje a Miguel de Cervantes que luchó en Lepanto a las órdenes del capitán alcarreño Diego de Urbina; en recuerdo de su abuelo y de su padre Juan y Rodrigo de Cervantes que vivieron en nuestra ciudad y en testimonio de gratitud a su universal Quijote y a los personajes, familias y lugares de Guadalajara citados en su monumental obra.” ·
VILLANUEVA DE LOS INFANTES (Ciudad Real)
En la explanada existente al frente de la Iglesia de San Andrés de esta ciudad de tanta historia acumulada, se encuentran unas estatuas en el mismo suelo del pavimento y con las figuras aisladas en la zona.
Las estatuas fueron impuestas en el año 2008 y su autor fue el escultor Juan Antonio Giraldo Fernández de Sevilla, nacido en la misma localidad, que cedió toda la obra al Ayuntamiento.
Las estatuas están terminadas en bronce y de forma muy evidentes se presentan a don Quijote separado de Rocinante que viene detrás y más apartado aún, Sancho Panza, que empuja a Rucio para seguir caminando. La imagen desde luego es apasionante y llena un espacio completo de Cervantes y su valor literario.
EL TOBOSO (Toledo)
El pueblo de Dulcinea no podía permitirse no tener una dedicación especial al amor venerado de don Quijote. La ciudad se encuentra incluida en la Red de Ciudades Cervantinas.
Efectivamente en la Plaza de la Constitución, donde se encuentra la Iglesia de San Antonio Abad, apelada como la Catedral de La Mancha, existe un monumento de don Quijote y Dulcinea.
El conjunto se encuentra con la figura de don Quijote de rodillas y la lanza alzada enfrente de Dulcinea que le escucha de pie, como si estuviera solicitando algo a ella, que imaginamos que sería su declaración de amor.
Toda la estructura es metalizada y ambas estatuas se sustentan sobre dos grandes bloques sólidos de piedra.
Además, en la localidad existe la Casa de Dulcinea y un Museo Cervantino y se instalaron en el año 2015.
