Comer entre horas es una costumbre plenamente arraigada entre la población castellano-manchega, que se decanta por aperitivos salados que se consumen preferentemente en el propio hogar, por la tarde y con el objetivo de matar el gusanillo, según el estudio ‘Un país de picoteo’, realizado por Snack’In For You, la marca de aperitivos de la multinacional de la alimentación Sigma. Las principales conclusiones regionales del estudio se han hecho públicas coincidiendo con el Día Mundial de la Alimentación, que se celebra cada 16 de octubre.
De acuerdo con el informe, los productos salados del perfil de las patatas fritas o palomitas (13%) son los preferidos por la población castellano-manchega, seguidos por la fruta (10%), los frutos secos (9%), los embutidos (8%) y los quesos (7%).
Si bien estas cifras sobre preferencias están en línea con la media nacional, llama la atención el hecho de que los castellano-manchegos sean la población que menos renuncia al desayuno. Así, mientras en otras comunidades se aprecia una tendencia a sustituir el desayuno por un aperitivo a media mañana, Castilla La Mancha es la Comunidad en la que menos se da esta tendencia (0,6% frente a una media nacional del 4,6%).
Asimismo, en comparación con la media nacional, son más los castellano-manchegos que toman el aperitivo más de dos veces al día (9% frente a una media nacional del 4,4%).
Si bien la posibilidad de darse un momento de placer (18%) o el sabor (15%) son las principales razones esgrimidas por los castellano-manchegos a la hora de elegir su aperitivo o snack, la preocupación por la salud ya es tan importante (12%) como el hecho de que el producto resulte sabroso, siendo también destacada la predilección por productos naturales y no procesados (6%).
Esta orientación hacia lo saludable está abriendo las puertas a nuevas formas de consumo de aperitivos compatibles con una dieta equilibrada en la que el sabor no está reñido con el valor nutricional de lo que se come.