Movistar ha reforzado y ampliado su cobertura móvil en Castilla-La Mancha esta Semana Santa, especialmente en zonas de gran afluencia de visitantes y segundas residencias para prestar un mejor servicio a sus clientes.
Para ello, la compañía ha puesto en marcha un plan de refuerzo del servicio móvil que incluye tanto ampliación de nuevos equipos, como la aplicación de nuevas parametrizaciones para asumir la subida de tráfico y distribuir éste de forma más eficiente, mejorando así la calidad de las comunicaciones.
Las zonas específicas sobre las que se ha actuado son Cuenca capital; en Albacete, en las poblaciones de Hellín y Tobarra y en Ciudad Real, además de en la capital, en Alamillo, Almagro, Almuradiel, Calzada de Calatrava, Carrión de Calatrava, Campo de Criptana, Daimiel, Villanueva de los Infantes, Manzanares, El Robledo, Santa Cruz de Mudela y Valdepeñas.
Respecto a otras zonas con gran afluencia de turistas en estas fechas, cómo, por ejemplo, Toledo no ha sido necesaria ninguna actuación específica adicional, puesto que se considera que la red está suficientemente dimensionada para asumir picos de tráfico móvil.
En este sentido, Movistar está ampliando semanalmente el número de poblaciones en las que está encendiendo nodos 5G, especialmente, en banda de 700 Mhz. Esta tecnología beneficia ya a más de 200 poblaciones, con una cobertura poblacional del 75%, que aumenta a un 97% en el caso de la cobertura de banda ancha 4G.
