El equipo dirigido por Carlos Alberto Yuste volvió a demostrar una semana más su buena racha acumulada, compitiendo a un gran nivel en la cancha del primer clasificado, el BM Caserío Ciudad Real. Como cualquier derbi manchego, el partido que recibió el Quijote Arena, que contó con una gran entrada y un ambiente de diez en la grada donde se respetó en todo momento las medidas de seguridad, ambas aficiones pudieron disfrutar de una auténtico partidazo de balonmano.
Si por algo cobraba más importancia este derbi, era porque ambos equipos de la provincia se encontraban en puestos de ascenso a escasos puntos el uno del otro. Tras la gran racha de partidos disputados anteriormente por los de Yuste, saltaban a la pista del Quijote Arena con todos sus efectivos y con el mejor estado de forma. Los de Bolaños eran conscientes que para mantener la segunda plaza durante una semana más debían demostrar firmeza en la pista.
El partido arrancó con gran emoción. Ambos equipos demostraron un alto nivel de competitividad desde el inicio, llegando a ir igualados en algún parcial de la primera mitad. Algunos errores del Balonmano Bolaños hacían que se marcharan al descanso 15-12 para el cuadro local.
La segunda mitad comenzó muy distinta de la primera. Los bolañegos salían adormecidos al terreno de juego, siendo esto aprovechado por el BM Caserío que se marchaba en el marcador y acumulaba un gran colchón de confianza con seis tantos por encima. Pero como viene siendo normal en este tipo de partidos desde otras temporadas, los de Carlos Alberto Yuste se recompusieron a partir de la defensa.
Tras un cambio en la portería bolañega donde apareció un gran Mario Blanco, y la reconstrucción de la defensa con Jean de Jesús como pilar fundamental, comenzó una remontada histórica. El ataque ciudadrealeño no conseguía acertar mientras que en el cuadro bolañego, Victoriano Alises se echaba el equipo a la espalda e igualaba el partido.
Se vivió un final de infarto tras terminar el partido empate a 27 y con un ‘7 metros’ a tiempo parado que se encargaría de formalizar el ex alarquista Fran Vidal. Pero la portería bolañega se hizo pequeña gracias a otro ex alarquista, el guardameta Mario Blanco que consiguió atajar el penalti y brindar un punto de oro a su equipo desde la pena máxima.
Los de Yuste se preparan para recibir el próximo día 11 de abril al BM Maravillas Benalmádena en casa, recortando un punto de distancia con el líder, estando ahora a dos. Aún restan siete jornadas para el final de la competición y los bolañegos siguen teniendo opciones de asaltar el liderato, por lo que la afición verde podrá seguir creyendo en conseguir el objetivo de jugar el ascenso.
