El catedrático de Química Orgánica de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) Enrique Díez Barra ha recibido hoy el Premio a la Trayectoria Científica que concede la sección territorial castellanomanchega de la Real Sociedad Española de Química (RSEQ). La entrega ha tenido lugar en el Campus de Ciudad Real durante el transcurso de la IV Jornada de Divulgación en Químicas, cuya inauguración ha presidido el rector de la Universidad regional, Julián Garde; junto con la presidenta de sección territorial de la RSEQ, la profesora de la Universidad regional María Antonia Herrero; y el director general de Universidades, Investigación e Innovación, Ricardo Cuevas.
Con este premio, la Real Sociedad Española de Química en Castilla-La Mancha reconoce la apuesta del profesor Díez Barra al desarrollo de la química en la región, “contribuyendo durante su gestión al incremento de los presupuestos e infraestructuras de la UCLM y a la dinamización del PRINCET -primer plan regional de I+D+i-, lo que supuso para la región una mejora sustancial de la I+D en general y de la química en particular”.
Doctor por la Universidad Complutense, Enrique Díez Barra fue decano de la Facultad de Ciencias y Tecnologías Químicas del Campus de Ciudad Real (1985) y vicerrector de Profesorado y Ordenación Académica de la UCLM (1998); y hasta 2004 fue director del CICAT (centro predecesor del Instituto Regional de Investigación Científica Aplicada, IRICA) y del Departamento de Química Inorgánica, Orgánica y Bioquímica.
El profesor Díez Barra inicia su actividad científica en la línea de métodos con convencionales en química: catálisis por transferencia de fase en ausencia de disolvente y microondas en síntesis orgánica. Posteriormente, centra su trabajo en la síntesis y propiedades de dendrímeros fotoluminiscentes y, más recientemente, en la preparación de derivados de grafeno, quantum dots de grafeno e hidrogeles.
A lo largo de esta jornada, la organización que agrupa a los químicos castellano-manchegos también ha galardonado con el Premio Divulgación Científica en Química a la investigadora del Instituto de Investigación en Combustión y Contaminación Atmosférica de la UCLM Florentina Villanueva por “su notable labor divulgadora de la química en diferentes medios y, en especial, su actividad durante la pandemia de la COVID-19 relativa a cómo reducir el riesgo de contagios en espacios interiores”.
A estos reconocimientos, en la edición de 2022 hay que sumar el Premio Trabajo Fin de Máster, que ha recaído en la investigadora de la UCLM María Asensio; el Premio Mejor Tesis Doctoral, que ha sido para Virginia Cuesta Gómez; y el Premio Jóvenes Investigadores Químicos, para la profesora de la UCLM Ana Sousa Hervés.
Con estos galardones, según ha explicado la presidenta de la sección territorial castellanomanchega de la RSEQ, la organización pretende reconocer la labor de quienes trabajan en esta disciplina, así como fomentar la vocación por la misma entre los jóvenes preuniversitarios. A estos, la organización dirige su concurso de vídeos ‘La Química que nos rodea’, cuyos premios también se han entregado hoy, junto con los del concurso de vídeos ‘Apadrina tu vídeo’, abierto a universitarios de un Grado relacionado con la Química; y el reconocimiento que se ha brindado a los estudiantes clasificados en la Olimpiada Regional de Química.
De forma previa a la entrega de premios se ha inaugurado una exposición de paneles sobre los Premios Nobel de Química del siglo XXI, que llegará a varios institutos de la provincia; y se ha contado con la intervención de la divulgadora científica Deborah García Bello, conocida por su participación en programas televisivos como ‘Órbita Laika’ de TVE o ‘Más Vale Tarde’ de La Sexta, quien ha impartido la charla Todo es cuestión de química.
García Bello ha considerado que “no todos los científicos tienen porqué saber comunicar ciencia” y ha dicho que “quizás lo que deben hacer es tener a un experto a su lado con formación científica y en comunicación, que sea capaz de trasladar al público común sus investigaciones”. La divulgadora ha aconsejado a los investigadores que cuando reciben una llamada del periodista “cojan el teléfono y expliquen su paper” y que “salgan fuera del círculo de amigos científicos. Así, ellos también aprenden”.
