No podía faltar en nuestro recuerdo y reverencia por las muchas mujeres que fueron valientes, atrevidas y que demostraron que el valor, la aventura y las batallas es cosa de hombres, quizá porque la imagen que tenemos de esta mujer se debe casi exclusivamente a su valentía por defender la entrada contra los franceses a la puerta del Portillo en Zaragoza.
Repasando algunos obras, publicaciones y bibliografía sobre esta mujer, podemos definir que fue una verdadera defensora y guerrera durante gran parte de su vida y en especial en la lucha contra los franceses y no solamente en Zaragoza, con distintas aptitudes y actitudes que supo aprovechar para poder defender la lucha y la guerra.
Su nombre era Agustina Raimunda Zaragoza Doménech y era catalana, nacida en Reus (Tarragona) en el año 1786 y vivió en Barcelona hasta que, en el año 1803, a sus 17 años, contrae matrimonio con un cabo de artillería, por lo que, con motivo de la guerra con los franceses, estaba destinado en Zaragoza y allí tuvo que desplazarse.
El hecho por el que está conocida se debe a que su marido estaba en la llamada puerta del Portillo donde los soldados españoles se encontraban en delicadas circunstancias, muchos heridos y ella llevaba la comida su marido y esta mujer, viendo la delicada situación defensiva y el ataque que se iba a producir por parte de los franceses, cogió una mecha y encendió un cañón que disparó contra los franceses, que, por un motivo u otro, dejaron de atacar por esa puerta del Portillo.
Quizá los hechos posteriores son más desconocidos, pero la fama de Agustina llegó a los oídos de Palafox que la nombró como artillera en su homenaje, de tal forma que adquirió una fama de salvadora y valiente que produjo una animación en las tropas y fue considerada como la “Defensora de Zaragoza”.
Pero Agustina siguió su proceso y continuó actuando en la defensa de Zaragoza, combatiendo en diversas batallas, hasta que en el año 1809 y después de dos meses de lucha, Zaragoza fue vencida por los franceses.
Los franceses apresaron a Agustina y posteriormente fue canjeada.
Pero Agustina prosiguió su defensa de los españoles e intervino en otras batallas y acontecimientos como en la batalla de Tarragona, habiendo llegado a obtener los galones de sargento y de subteniente. Actuó últimamente en la batalla de Vitoria con el general Morillo. Durante todo su periodo, llamémoslo bélico fue un estandarte de la lucha por la expulsión de los franceses y ejemplo para los soldados.
La vida posterior de Agustina evolucionó cuando se casó en segundas nupcias con un médico en Ceuta, y trasladándose a Sevilla, donde ejercía su marido, pero éste era partidario del carlismo, por lo que se separaron y finalmente Agustina se trasladó a Ceuta con su hija que estaba casada con un militar y allí falleció en el año 1857 con 71 años de edad.
*** Fue enterrada en Ceuta y sus restos fueron trasladados a Zaragoza en 1908 a la capilla de Nuestra Señora del Portillo en Zaragoza.
*** En 1913 se instaló una placa conmemorativa en el lugar de Ceuta donde residió.
*** Dispone de una calle en Valladolid y otra en Aranda de Duero.
*** En 1950 de estrenó una película con el título de “Agustina de Aragón “del director Juan de Orduña y Aurora Bautista, como protagonista.
*** Varios pintores realizaron cuadros de esta heroína concretamente Goya, Juan Gálvez y Augusto Ferrer-Dalmau, así como tres cuadros dedicados a la defensa de Zaragoza con la imagen de Agustina.
*** En Zaragoza existe un monumento dedicado a su imagen.