Desde la década de los sesenta y setenta, muchos pueblos de España se han quedado desérticos, sin habitantes, con calles abandonadas y plazas vacías. Los últimos habitantes fueron muriendo y las nuevas generaciones se fueron mudando a las ciudades. El paisaje es desolador en muchos lugares. Y ese hecho triste no se ve de igual manera en otros países…
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La España vaciada se irá repoblando gracias a la tecnología
Si miramos el mapa de España, nos daremos cuenta de la gran cantidad de kilómetros
cuadrados que tienen una densidad de población baja. ¿Qué ocurre? ¿Ya no nace
gente? A esa pregunta hay que contestar la verdad: No. No nacen españoles. Y es que, la repoblación de la España vaciada empieza a ser una gran preocupación. Durante décadas, miles de pueblos, especialmente en el interior, fueron perdiendo población de forma constante debido a la falta de trabajo, básicamente, y al mismo tiempo, a la falta de medios de transporte que nos acercaran a las ciudades. Esta despoblación generó un desequilibrio entre las grandes ciudades y el mundo rural, provocando el envejecimiento de las zonas rurales, a desaparición de servicios públicos y el abandono de viviendas e infraestructuras.
La tecnología ayudaría a repoblar
Muchas personas, nietos de aquellos que abandonaron los pueblos en las décadas de los sesenta y setenta, han comenzado a darse cuenta de que la vida en el medio rural no es imposible, siempre y cuando se desarrolle un trabajo dentro del sector «nómada electrónico». La vida en la ciudad resulta demasiado cara, principalmente debido a los alquileres. Empezar a considerar una vida en el medio rural no es tan mala idea si en las ciudades ya no se puede subsistir. Posiblemente, si esta tendencia a repoblar zonas rurales persiste, estas irán ganando habitantes, con el consiguiente aumento de los servicios. Este hecho es todavía un misterio que se verá con el tiempo, pero tiene visos de ser un hecho en los próximos años.
El empleo ha cambiado
Gracias a las nuevas tecnologías, muchos oficios se hacen ahora online. A ello hay que sumar la inteligencia artificial, ya que promete mucho la revolución que va a causar en muchos sectores. ¿Quién sabe qué oficios habrá de aquí a unos diez o veinte años? Es un misterio, pero, desde luego, que el mundo digital avanza a pasos agigantados.
