Hoy en el Salón de Plenos del consitorio tomellosero, ha tenido lugar una rueda de prensa por el portavoz del equipo de Gobierno, Benjamín de Sebastián que llegaba tras la celebrarse la Comisión de Desarrollo Sostenible celebrada hoy y que ha generado gran expectación, al centrarse en la posible instalación de una planta de biometano a 15 kilómetros de Tomelloso, una propuesta que ha suscitado tanto el apoyo como la preocupación de la comunidad.
El encuentro en la comisión, ha explicado, comenzó con la presentación de toda la documentación sobre el proyecto por parte de la empresa interesada en su instalación, permitió a los representantes políticos y técnicos aclarar aspectos clave de la iniciativa. La planta de biometano, una instalación destinada a la transformación de residuos orgánicos en gas renovable, se enmarca dentro de un plan de biometanización impulsado por el Gobierno Regional y el Gobierno Nacional, con el objetivo de fomentar la transición hacia energías más sostenibles.
De Sebastián, reiteró que el proyecto se encuentra en su fase preliminar, y subrayó que la participación de los ciudadanos ha sido una prioridad desde el inicio del proceso. «Estamos reuniéndonos con todos los sectores afectados, las cooperativas, las destilerías y la sociedad civil para explicar el proyecto a fondo», afirmó, destacando la importancia de un proceso transparente.
Uno de los puntos más controvertidos ha sido la legalidad y la competencia sobre la instalación de la planta. En su intervención, el portavoz recalcó que la competencia para autorizar proyectos de este tipo recae en la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. «La planta de biometano está regulada bajo la Ley 4.2020, y corresponde a la Comisión Provincial de Urbanismo de Ciudad Real hacer la propuesta de resolución,» explicó. La planta se considera un proyecto de interés prioritario dentro de un marco nacional de energías renovables, que ya ha sido implementado en otras regiones.
Por su parte, ha explicado que el informe del secretario del Ayuntamiento de Tomelloso ha aclarado que el rol del municipio se limita al otorgamiento de la licencia urbanística, un procedimiento reglado que no deja espacio para decisiones discrecionales. «Si se cumplen los requisitos, la licencia debe ser concedida».
El debate sobre los impactos medioambientales también ha sido un punto central en la intervención del portavoz donde ha explicado que que las materias primas que se utilizarán, como vinazas, purines y estiércol, ya están disponibles localmente, lo que contribuirá a la reducción de residuos en la zona. En este sentido, se destacó que la planta no será una fuente de «macrogranjas», como se ha temido, sino que aprovechará los residuos orgánicos generados en la región.
Además, se abordó el tema de la posible contaminación de los acuíferos, un argumento que ha generado inquietud entre los residentes. Sin embargo, el proyecto cumple con todos los requisitos establecidos por las autoridades, que buscan evitar la contaminación de nitratos y otros compuestos en las aguas subterráneas. «El biometano es una solución para gestionar los residuos de manera más limpia y eficiente,» sostuvo Benjamín.
El futuro de la planta de biometano depende ahora de la resolución de la Comisión Provincial de Urbanismo, pero las conversaciones y consultas seguirán abiertas con los ciudadanos, en un intento por resolver las dudas y mejorar el proyecto. «No hemos firmado nada aún con la empresa, y seguiremos buscando el consenso en el pleno,» concluyó, dejando claro que la decisión final será tomada por el consejo municipal, tras la consulta pública y las valoraciones técnicas correspondientes.
Sobre la planta de biometano en Tomelloso también aclaró que el proyecto forma parte de un ambicioso plan para convertir la región en un referente en el uso de energías renovables, al mismo tiempo que se resuelven problemas ambientales derivados del exceso de residuos. «Enert, la empresa detrás del proyecto, tiene además de este proyecto en Tomelloso en otros lugares de España con plantas ya operativas en otras comunidades autónomas».
