.- “Esta misma semana vamos a firmar un pacto con empresarios y sindicatos enormemente trascendente hasta el 2030, que va a movilizar una inversión pública y privada extraordinaria. La agenda de esta región no es una agenda solo del presidente de turno, aunque tenga un turno largo, es de empresarios, es de sindicatos, es del conjunto de la sociedad”. Así se ha pronunciado esta mañana el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, en la inauguración del foro ‘Internacionalización de la economía de Castilla-La Mancha en el siglo XXI’ que El Confidencial ha organizado en la ciudad de Toledo.
En este contexto, junto a la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco y la Portavoz del Gobierno regional, Esther Padilla, el presidente autonómico ha subrayado que “independientemente de las habilidades políticas, aquí apostamos por el pacto y, obviamente, apostamos por la honestidad. La honestidad no tendría que entrar en el mercado de la negociación política”.
Del mismo modo, tras ubicar a los asistentes al foro en la trayectoria histórica y consecuentemente económica de Castilla-La Mancha, el mandatario autonómico ha argumentado que, a una región que “ha hecho de la necesidad virtud”, que siempre ha estado “en el medio del país, pero nunca en el centro”, lo que le interesa “es crecer y queremos crecer más que nadie, y felicitamos al que triunfa y le agradecemos, incluso le agradecemos más si se viene y se instala aquí”.
El 75 por ciento de las empresas de inversión extranjera, repiten
En este orden de cosas, ha señalado que el 75 por ciento de las empresas de inversión extranjera que se han instalado en Castilla-La Mancha “no solo están contentas, sino que en muchos casos han ampliado y han reinvertido, lo cual pone de manifiesto que la situación no es pasajera”. “Nos interesa crecer para compartir, para transformar esa riqueza colectiva en mejoras de las condiciones sociales y del concepto de igualdad que sin aspavientos defendemos a ultranza”, ha proseguido.
“Hemos convertido incluso el hándicap de esta región, que siempre ha sido la distancia entre población y territorio, en una gran ventaja”, ha relatado García-Page, al tiempo que ha presumido de que esta es una región libre de en frentismos y de populismo. “Mientras podamos vamos a salvarnos de este destrozo estéril que significa estar peleando por todo para no conseguir absolutamente nada”, ha argumentado el presidente García-Page, convencido de que “aquí quien quiera venir a invertir -y lo pueden atestiguar los que ya lo hacen y lo hacen muchos-, saben que respetamos la ley, que la ley tiene que ser igual para todos, aquí se respetan las normas”.
Para el presidente autonómico “tener que recalcar lo obvio resulta casi sonrojante, aquí, digamos, se respeta la palabra. Aquí pactamos”.
Emiliano García-Page ha reconocido que la economía en conjunto en España está yendo bien. “Seguramente para muchos puede resultar un tanto inexplicable con el nivel de ruido que preside la actualidad política en España, política y no solo política, y yo creo que la ciudadanía tiene claro desde hace ya mucho tiempo que el 90 % del ruido que hay fabricado en España es un ruido artificial creado a propósito”, ha considerado.
El jefe del Ejecutivo regional está convencido de que “la gente intenta mantener un ritmo normal en su vida diaria, como lo intentan las empresas, más allá de la desesperanza que genera tanto frentismo, tanto populismo institucionalizado en España y tanto nivel de crispación”.
A pesar de que ha considerado que España “está viviendo uno de los momentos más degradados de la vida política en lo que llevamos de democracia, un momento de los más degradados que yo he podido presenciar”, el presidente de Castilla-La Mancha ha invitado a todo el que quiera a invertir en la región porque “aquí no se piden comisiones, no se piden mordidas, aquí no hay atajo, nos sentamos sin ningún tipo de problema con un empresario para hablar de sus proyectos. Digamos que esta es una región en la que el que venga a invertir, sabe a qué atenerse, que no es poca cosa”, ha concluido.













