Villacañas ha sido protagonista de un proyecto educativo global impulsado por la UNESCO: Happy Schools, una iniciativa que busca promover el bienestar integral en entornos educativos. Ocho países del movimiento internacional Design for Change (DFC) han desarrollado un piloto aplicando su metodología propia para desarrollar proyectos de transformación bajo los pilares de Happy Schools.
Gwang-Chol Chang, jefe de Políticas Educativas en la sede central de la UNESCO, destacó la importancia del piloto global y el potencial del enfoque Happy Schools para dar respuesta a los desafíos actuales de los sistemas educativos en todo el mundo: “La UNESCO ha lanzado la iniciativa Happy Schools como una vía para abordar la crisis de aprendizaje y bienestar que afecta a un número creciente de sistemas educativos. Nos complace ver que el marco de Happy Schools, a través de sus cuatro pilares, puede contribuir de manera real a mejorar la experiencia y los resultados del aprendizaje, creando entornos educativos más inclusivos, solidarios y alegres, y recuperando una de las funciones esenciales de la escuela: la socialización.”
En nuestro país, el piloto ha sido liderado por DFC España y ha contado con la implicación del Colegio Nuestra Señora de la Consolación de Villacañas, cuyo compromiso ha sido clave para su éxito. El profesor encargado de liderar el proyecto, Sergio García, comentaba: “Gracias por darme herramientas para ser mejor profesor y mejor ciudadano. Gracias por darme vitaminas para continuar viviendo la educación con pasión y creatividad”.
Durante seis meses, el colegio ha trabajado con su alumnado en el proyecto DFC “Compartiendo sonrisas”, centrado en fomentar la empatía y las relaciones intergeneracionales. Dieciocho alumnos y alumnas de cuarto de Primaria han diseñado experiencias de juego cooperativo para personas mayores de la Residencia de mayores Villacañas (Grupo Centenari) y para los usuarios del Centro Ocupacional de Villacañas. A través del juego, han compartido experiencias con personas de estos colectivos, construyendo puentes entre generaciones y demostrando como la educación puede transformar comunidades.
Concretamente, en la residencia se han beneficiado de su proyecto DFC 72 personas mayores y sus familias y 8 trabajadores. En el centro ocupacional, han trabajado con 19 personas con discapacidad y 6 trabajadores.
Design for Change España ha sido la organización responsable de la coordinación del piloto, gracias a su experiencia y su compromiso con el diseño de soluciones para el desarrollo del bienestar con los jóvenes, principalmente gracias al proyecto europeo H2020 IN-HABIT (Inclusive Health And Wellbeing in small and medium-sized cities), donde desde 2020 se están identificando soluciones innovadoras e integradas para promover la salud y el bienestar inclusivos en ciudades pequeñas y medianas.
Este piloto ha conectado a escuelas de ocho países gracias a reuniones online mensuales y un propósito común: construir entornos educativos más felices, humanos e inclusivos. Finalmente, han terminado sus proyectos DFC en cinco de los ocho países, puesto que la situación política y los conflictos internos no han permitido concluir el piloto en Líbano, Serbia y Kenia. La experiencia ha permitido al alumnado de un colegio en Bután, dos en Malasia, cinco en Zambia, y uno en Emiratos Árabes Unidos, identificar retos reales de su entorno y poner en marcha soluciones creativas, con especial atención al bienestar emocional, la inclusión y la participación activa.
Aunque este piloto global finaliza oficialmente el 22 de abril, la iniciativa está abierta a todas las escuelas en España que quieran desarrollar proyectos Design for Change bajo los pilares de la UNESCO: Personas, Procesos, Lugares y Principios. En Villacañas, el legado de Happy Schools seguirá vivo en las aulas, en las residencias y en cada historia compartida por quienes han sentido que la felicidad también se aprende y se contagia.