Villacañas conmemora el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres para sensibilizar, concienciar y seguir reafirmando el compromiso con la igualdad, la justicia, la dignidad y la libertad.
Con motivo de la conmemoración del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer el 25 de noviembre, la concejalía de Igualdad del Ayuntamiento de Villacañas, a través del Centro de la Mujer y junto al Consejo de Igualdad, han celebrado un acto institucional en el Teatro Municipal “Miguel de Cervantes” en el que han participado autoridades, encabezadas por la concejala de Igualdad, Irene Rivera, decenas de vecinos y vecinas, el colectivo asociativo y centros educativos de la localidad.
El acto ha comenzado con la proyección de un ciclo de cortometrajes dedicados a las víctimas de violencia de género, piezas audiovisuales que han buscado sensibilizar y promover la reflexión entre los más jóvenes sobre esta grave vulneración de derechos humanos.
A continuación, se ha procedido a la lectura del Manifiesto institucional del 25N y la lectura de los nombres de las mujeres asesinadas en 2025 por violencia de género.
La concejala de Igualdad, Irene Rivera, ha señalado que “hoy, 25 de noviembre, recordamos a todas las mujeres que han sufrido violencia de género en cualquier de sus formas, también a quienes han sido atacadas, expuestas o perseguidas en el entorno digital. Y afirmamos, con rotundidad, que no habrá avances reales, que no lograremos una sociedad verdaderamente democrática e igualitaria, si no abordamos también la violencia de género digital”.
A su vez, Rivera ha recordado que “en este 25 de noviembre hacemos un llamamiento a la unidad frente a la violencia machista, a la empatía, al respeto y a la responsabilidad”.
El Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres es necesario para visibilizar y denunciar la violencia de género y para reclamar políticas en todos los países para su erradicación. Las cifras de la violencia de género en nuestro país muestran, insistentemente, la dimensión de un problema que sigue resquebrajando los cimientos de nuestra sociedad. En España, desde el año 2003, 1.333 mujeres han sido asesinadas por sus parejas o exparejas, 60 de ellas en Castilla-La Mancha. Durante 2025, 38 mujeres han sido asesinadas, 1 de ellas en nuestra región.
Esos asesinatos constituyen únicamente la punta del iceberg de una violencia estructural que deja niñas y niños en situación de orfandad, familias rotas y proyectos vitales destruidos. Sin olvidar la más cruel de las violencias que se ejercen contra las mujeres, los asesinatos. La forma de ejercer violencia machista también se ha transformado, adaptado y expandido a medida que ha avanzado la tecnología.
En la actualidad, el entorno digital se ha convertido en un espacio donde se reproducen y multiplican las violencias machistas: desde el ciberacoso y la vigilancia no consentida, hasta la difusión de imágenes íntimas sin permiso, la ciberviolencia de pareja, las amenazas, la suplantación de identidad o el control. Sin embargo, la expansión de la tecnología no es el origen de la violencia sino un reflejo de una desigualdad estructural que sigue marcando la vida de miles de mujeres y niñas. El espacio digital y la sensación de anonimato que genera amplifica los discursos machistas, facilita la impunidad y permite que la violencia traspase los límites físicos, convirtiéndose en una herramienta que invade espacios personales, familiares y profesionales.
Porque la eliminación de la violencia contra las mujeres es un objetivo irrenunciable e inaplazable si nuestras metas comunes son la libertad y la igualdad como máximas de nuestra sociedad.
Combatir la cultura del odio y el negacionismo de la violencia de género que se extiende en el entorno digital son tareas urgentes y posibles sí, y sólo sí, actuamos juntas y juntos con el objetivo de poner la tecnología al servicio de la igualdad.
